DOS INÉDITOS Y UN BREVE HOMENAJE
A PATRICIA DEL VALLE
Por José Antonio Mazzotti
Desde hace unos años me persigue la idea de editar un libro que haga en poesía lo que la culinaria peruana hace en las bocas del mundo: deleitarlas con lo mejor de su arte.
El proyecto Suspiro de lengua constaría de poemas expresamente compuestos sobre un plato peruano de la elección del poeta invitado. No se trataría de hablar de o simplemente describir el plato, sino de reproducir en lenguaje poético la sensación (o algo muy cercano) que despierta el manjar escogido en las papilas del comensal. Cerca de 25 poetas fueron llamados y todos se animaron. Sin embargo, la lista es fluctuante. Hay platos que aún no gozan de cantor.
Los principales ya están tomados: causa, solterito, arroz con pollo, seco de chabelo, patasca, adobo, cebiche, chupe de camarones, sancochado, ají de gallina, tacu-tacu montado con lomo saltado, sopaseca, cau-cau, arroz chaufa de pollo, cuy chactado, guargüero, suspiro a la limeña y otros famosos esperan con paciencia su poema.
Patricia del Valle escogió dos platos no muy conocidos: inchikapi y arroz con pianito. Y fue de las pocas que enviaron sus poemas a tiempo. A los otros poetas les aguarda un amistoso recordaris.
Los dos textos de Patricia se ofrecen aquí como primicia y adelanto de Suspiro de lengua, un libro que poco a poco va tomando cuerpo, como un banquete cocinado lentamente, a la luz de las estrellas y el fuego de las memorias infantiles. Pero, sobre todo, los inéditos de Patricia se publican en honor a la memoria de su autora, que además de una excelente poeta, era una bellísima persona. Una semblanza sobre ella por la crítica Giancarla Di Laura puede leerse aquí.
Patricia del Valle Cárdenas (Arequipa, 1956-Lima, 2022), aparte de poeta, era ensayista y arquitecta. Nos dejó súbitamente el 21 de octubre de este año 2022. Había publicado en Lima los libros Yokasta yo (arteidea editores, 2005), Soy otra (ediciones Sol & Niebla, 2010), Hielo negro (2014), Músika para sordos (Fondo Editorial Cultura Peruana, 2017) y conformó TetraLogos, grupo cultural dedicado al activismo poético.
Nos quedaremos sin probar su inchikapi a base de maní y su arroz con pianito con harto ají. Pero quedan sus poemas, imbatibles a la pérdida del gusto y a las lenguas silenciosas.
Descansa en paz, querida amiga, poeta.
INCHIKAPI
Pecado en pleno día
canto sincopado
se reinventa el amor
el ave vuela
hacia ti / hacia mí
hierve la piel
mágica poción
sazón a fuego lento
maíz amarillo /maní / culantro grande
¿Cómo? ¿Cuánto? ¿En qué momento?
química de tiempo exacto
un poco de ají & pasión
naturalmente
nos atrapa
paciencia & tolerancia
sortilegio desnudo
en el ancho Amazonas
de un costado a otro
bajo palmeras en cielo azul
como hechizo en tierra santa
mordimos el anzuelo
EL SECRETO ARROZ CON PIANITO
como quien busca un antiguo amor
camino las calles de Barrios Altos
luego de la Plaza Italia
y Cinco Esquinas
Llego donde el chino Miguel
entro / me siento
en abrazo largo pasa Chavela
morena / quimbosa
falda corta / sandalias
Bajo techo común
con sello ritual
como una sentencia
me pregunta
¿Arroz con pianito?
Miro en sus manos el pedido
aligerarse la ropa
mucho de locura & cerveza negra
tierra / hierbas
frijol de castilla con
un poco de pisco al punto
como contingencia
alquimia & espíritu
polvo de ajo /cebolla
mucha agua y necesario humor
Pasaron los años
mis sentidos se confunden
parece inimaginable
el precinto secreto
que el guiso de la abuela
dejó en mi memoria